Facebook...

to add or not to add... that´s is the question.....

Honrada...premio!!!

Honrada...honradísima...
Me han distinguido dos personas que adoro... por bloggueros, por actores y por excelentes sujetos...
* Pablo, capitán de su calle, el ojo más avizor de Almagro (www.capitandesucalle.blogspot.com)
* Safira, dulce criatura hecha mujer y amiga del alma (www.dulcecriatura.blogspot.com)

A su vez, quiero distinguir a dos personas especialìsimas...
* El Cuervo de Poe, amigo de la casa, comentador, picante...(http://instintodeeros.blogspot.com)
* Absinthe, mi padrino, mi amigo, mi tuneador, incondicional con el paso de los años y las situaciones...( http://keilwerth.blogspot.com)

a todos ellos...a los premios!!!

Lady y su cortejo...

Un cortejo bastante particular...
La escoltan un demonio con forma de mujer y un muerto...
Ella, vestida de blanco y semidesnuda, aguarda que sus cicatrices de muñecas y sus tajos sanen...para vivir un presente en paz...


foto: Salon of Hell (Miuki Madelaire- Claudio O' Connor)

Mi palacio...

Mi palacio tiene un sola puerta de entrada. A mi palacio se entra desde una escalera de mármol blanco y mausoléico.
Mi palacio tiene pisos de madera y pisos de cerámica antigua. Tanto, que los sucesivos arreglos han desdibujado los arabescos de su esplendor...
Mi palacio tiene lámparas de colores...paredes rosas, paredes blancas, techos altos.
Mi palacio tiene dos heladeras, dos cocinas, dos gatos negros...
Mi palacio tiene un ropero blanco, alto...donde guardo todos mis disfraces, vestidos de gala, remeras rotas...
Mi palacio tiene vitrales, por los que la luz de la mañana se cuela inundándome de melancolías...
Mi palacio tiene una tina de baño, un espejo decorado con gel, toallas de abuela...
Mi palacio tiene una tele grande, un dvd que nunca me falla, un sillòn donde puedo llorar y reír...
Mi palacio tiene una biblioteca, llena de fotos, de piedritas de reinos lejanos, de encendedores olvidados...
Mi palacio tiene una pecera y un conejo de porcelana dentro de ella...
Mi palacio tiene cuadros que pinté yo, fotos que me sacaron amigos, postales de arte, fotocopias de la UBA, una colección de restos de velas que alguna vez, iluminaron noches de amor...
Mi palacio tiene almohadas que no hacen juego entre ellas, tiene colores rojos en sus tapices, tiene un baúl antiguo lleno de ropa de mamá...
Mi palacio está lleno de botellas vacías, ceniceros llenos de colillas, un LSD pasado, tabaco para armar...
Mi palacio tiene dos leones negros que lo escoltan.
Mi palacio tiene puertas de dos hojas, tiene balcones, tiene plantas que llegan hasta el techo...
Mi palacio tiene un rincón donde guardo mis libros de brujería.
Mi palacio tiene muebles oscuros, una cama de dos plazas, flores de tela en la mesa de luz...
Mi palacio tiene una cajita china donde guardo monedas, y un caballito de mar escondido entre mis camisones de seda...
Mi palacio tiene pelucas, plumas, maquillaje, purpurina... y crema de limpieza.
Mi palacio tiene una princesa.
Mi palacio tiene una mujer.
Mi palacio...

Sé que tengo que actualizar... pero no se me ocurre nada.
A ustedes les pasa también?

Luz y sombras....

Foto: Pablo Picotto (www.chicasdelosviernes.blogspot.com)
Modelo: Lady C

No todo es glamour...

Sé perfectamente cuantas ilusiones voy a echar por tierra cuando lean esto. Pero las ladys; especialmente Lady Camila; también vivimos. Las ladys nos levantamos con las arrugas de la almohada, nos probamos cinco conjuntos de ropa hasta decidir cuál nos queda mejor o cuál nos representa más ese día, puteamos por el colectivo, trabajamos, almorzamos en el escritorio de la oficina, rezongamos por los tacos, maldecimos al compañero que nos lanza un piropo guarango pensando que así es un rana bárbaro, nos peleamos con nuestro jefe, con nuestros clientes, insultamos vía mail, vía blackberry, vía msn, vía communicator; volvemos a putear al colectivo; buscamos la ropa en el lavadero, compramos comida para los gatos, si nos queda una mano libre (con la carpeta laboral, la ropa del lavadero y la bolsa de comida de los gatos) pasamos por el super a comprar lo que hace falta para que la señora que limpia tenga por lo menos lavandina para desinfectar algún rincón de la casa; llegamos a casa, soltamos las bolsas, ... y lloramos un rato. En realidad, lloramos un buen rato, sobre todo cuando mandamos sms a amigas que están en la facultad y no pueden responder, o cuando mamá esta descansando, o cuando la hermana esta tan contenta que no puede escuchar más que su propia voz. Lloramos por un feriado repentino insoportablemente largo. Por un anochecer que no puede tapar con purpurina. Por extrañar ciertas luces de neón.
Cuando las ladys nos desgañitamos de tanto llorar, nos secamos las lágrimas, nos miramos al espejo, levantamos la cabeza y hacemos la cama. Ordenamos. Lavamos. Limpiamos. Pensamos qué nos vamos a poner en la fiesta de esta noche. Escribimos en el blog. Nos servimos un trago. Nos fumamos un cigarrillo. Y esperamos...

Luz, cámara, acción...!

Llegó al set a las 11 de la mañana. Puntual. Se instaló en la habitación que le asignaron para sus cambios de vestuario, y comenzó los preparativos: el pelo planchado, el vestido retro, la sombra celeste, las botas altas, las pestañas postizas... Cuando estuvo lista, bajó a filmar. Jugó con los niños que actuaban con ella, dirigió sus tomas, charló con su partenaire...Hizo su segundo cambio de vestuario: vestido con plumas, corset, sombra oscura, más pestañas postizas... Esta vez, el set era una cama y una mesa de luz con un cuadro vacío. Su compañero entró al cuarto. Le sonrió. La escena debía estar cargada de violencia. Ellos se miraron. Un actor debe preparar su mente antes de actuar. Ellos ya estaban listos. Las luces se prendieron, la cámara rodó, el director susurró: "...acción..!"

bang bang...you're death.

Foto: Pablo Picotto (www.chicasdelosviernes.blogspot.com.ar)
Modelo: Lady C

...que se cruzen...

Hoy sólo hay miradas.Lady no tiene palabras, no tiene lucidez, no tiene energía. La cama, enorme, hizo un esfuerzo sobrehumano para soltarla desde sus esquinas blancas. Sus gatos no se corrieron ni un centímetro para dejarla salir del lecho. La ducha salío fría durante casi cinco minutos, se acabó el shampoo, el agua de la pava para el mate se hirvió, no podía decidir qué ponerse, la crema para peinar no la peinó, su sobretodo escapó escaleras arriba, le faltaban $0.05 para el peso, su mp3 agotó la pila...Por lo menos agarró el encendedor que funcionaba y tenía casi un atado de Lucky entero. Caminó hacia la parada del colectivo y rezó no verlo en la puerta de entrada. Sobrellevó la mañana entre charlas, alguna risa en una reunión laboral, un café tardío de Havanna...Lady, como una esfinge, esperaba el ascensor deleitando por adelantado el chocolate en su bolsillo...y lo vió. Sus miradas se cruzaron, él se acercó despacio y depositó un beso demasiado respetuoso en su mejilla.

Desde ese momento hasta ahora, solo quedan miradas. Lady se quedó sin energía, sin lucidez, sin palabras...

...esperando... que vuelvan a cruzarse...

...que se cruzen...